viernes, 31 de julio de 2009

Endosa SSP-DF lucha contra sexoservicio

Otra para opinión de Maite ... hoy en el Reforma.

Sexoservidoras interceptan a sus clientes en las calles de Buenavista, Aldama y Zaragoza.

Reconocen agentes al menos dos tipos de prostitución infantil en la zona

Grupo Reforma

Ciudad de México (31 julio 2009).- Las sexoservidoras que trabajan en la Colonia Buenavista, sus clientes y manejadores no serán molestados por la Policía capitalina, pues ésta no actuará sin una solicitud de la Delegación Cuauhtémoc.Así lo informó el titular de la Secretaría de Seguridad Pública del DF (SSP), Manuel Mondragón, quien dijo que el problema del sexoservicio debe ser resuelto por las autoridades delegacionales. El miércoles, la Comisión de Derechos Humanos del DF (CDHDF) emitió una recomendación para que la Policía intervenga en la zona, con el objetivo de proteger a los vecinos que residen en la colonia, los cuales se quejan de que hay poca vigilancia."Nosotros vamos a resolver las circunstancias que nos pida la Delegación. La prostitución está prohibida, pero hay algún tipo de tolerancia, porque los vecinos lo toleran, porque hay algunas áreas aisladas. "No tenemos por qué estar molestando en este campo y en este sentido. Cuando nos lo soliciten, tendremos que actuar. ¿En dónde está nuestra actuación? en hacerla y sin lesionar los derechos humanos de las señoras que a esto se dedican", dijo Mondragón.Lo que sí harán, agregó, será vigilar esa zona para evitar que oficiales extorsionen a las sexoservidoras.REFORMA buscó una entrevista con Noranelly González, encargada del despacho en Cuauhtémoc, pero el área de comunicación social informó que ella y todos los funcionarios estaban ocupados en el Gobierno central del DF.Funcionarios y agentes judiciales señalaron que combatir la trata de personas en la Delegación Cuauhtémoc es una tarea casi imposible, debido a que no existen denuncias serias, y pocas veces existe la flagrancia.Los agentes han detectado al menos dos tipos de prostitución infantil: la que ejercen los menores de edad indigentes a cambio de comida, droga o dinero para subsistir, y la de menores coaccionados por una persona."Tú vez al niño o a la niña con minifalda, pintada, y sabes que se prostituye, pero no les puedes hacer nada porque no la agarras en flagrancia, y si te acercas a preguntarle te dice que así le gusta vestirse."Pero tampoco te puedes meter al hotel porque no traes una orden y existe colusión entre los empleados, por lo cual te acusan de abuso de autoridad", dijo un comandante.Agregaron que hasta el momento no existe un registro sobre el número de niños explotados sexualmente.Rodolfo Casillas, investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), dijo que la falta de coordinación entre instancias capitalinas para combatir la trata de personas en el Distrito Federal ha derivado en que esta problemática sea una actividad tolerada.Siempre están aquí, de día y de nocheUna a una comienzan a llegar, se saludan y se mezclan entre el grupo de mujeres y travestis que cada noche ejercen la prostitución sobre las calles de la Colonia Buenavista.Su uniforme de trabajo: una pequeña blusa con un gran escote, una minifalda y zapatos con plataforma; el maquillaje varía, cada una aprovecha lo mejor de sus rasgos.Por las calles, aún transita la gente que se dirige hacia la estación del Metro o que espera el transporte colectivo para dirigirse a casa, e irremediablemente se encuentran a las sexoservidoras."Siempre están aquí, ya sea de día o de noche, tan sólo falta que busques un poco entre las calles que están alrededor y las vas a encontrar", dijo David, quien fue abordado por una chica.Sobre Puente de Alvarado desde Guerrero hasta la Avenida de los Insurgentes, los grupos de sexoservidoras se colocan en cada esquina, para facilitar a los clientes localizarlas.Para los comerciantes, las sexoservidoras se han vuelto parte del lugar; saben quiénes son, cuándo llegan, cuándo se van, con quién hacen grupo y por dónde trabajan.Durante las noches son escasos los patrullajes, las mujeres no permanecen en sus lugares por mucho tiempo y cuando llega un cliente se trasladan hacia un hotel.Por Ricardo Rivera, Henia Prado y Diana Martínez

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