miércoles, 3 de febrero de 2010

País disparejo

Así está nuestro México en este 2010 ya en avance. Y no, no es porque estemos jugando un “disparejo” para ver cual de las opciones es la mejor, por supuesto, de entre buenas opciones. Uy, no, lejos de eso estamos cuando vemos todo lo que nos está sucediendo. Vemos las matanzas y vemos la impunidad a cada rato, para de repente pensar que al menos no se armó el estallido social. Menos mal.
Ok, Felipe Calderón no tiene la culpa de lo que le tocó, con un país donde muchos esquemas de antes están en pleno deterioro, no en una verdadera re estructuración. Lo que sí es censurable para este gobierno de FCH es su poca cercanía con los ciudadanos. Por mucho que le inviertan en anuncios grandilocuentes, la verdad de las cosas es que se siente un gobierno federal frío, agazapado dentro de sus estrategias, muy propenso a ver enemigos en quien no los apoye cabalmente, bueno, plenamente.
Yendo de lo Universal a lo particular, el Distrito Federal puede decir que Marcelo Ebrard lo ha tratado de proyectar turísticamente con otro rasgo –oh coincidencias- de grandilocuencia en ese arbolote, la carísima pista, las playas. En eso, se ha rifado la gente del GDF, pero no en la seguridad, donde es a todas luces notorio que hay antros tolerados, donde la corrupción hace que vuelen camiones desde el desmejoradísimo segundo piso y donde cada nueva obra pública tiene olor a “Financiamiento 2012”. Por desgracia lo que le sucede a dos jugadores de futbol (del equipo de Televisa, para más señas) es algo que sufre tantísima gente al día, pero Ebrard sabe que no puede meter mucha mano con la policía, quién sabe por qué favores.
No faltará quien sugiera que Peña Nieto no es un santo y la razón le asiste. Comienza a ser burda la cargada que se le empieza a hacer en redes sociales al Jaimito Neutrón Región 4, quien por supuesto la opacidad en sus cuentas él y su staff apuestan a que no los alcance antes de 2012.

Así que ni Calderón ha podido poner orden empezando con los ricos cada vez más ricos (incluyendo al Chapo), ni Ebrard ha hecho de la Ciudad de México un mejor lugar para vivir y vamos a ver si Peña Nieto no encuentra un lucero de la mañana que ilumine / transparente esas cuentas que disiparían sospechas... NOT!

Todos se desquitarían con el Legislativo y la percepción que se tiene de ellos, la peor, por supuesto.

Este es el México del 2010, con sindicatos intocables, con información privilegiada, con elusión y evasión evidentes.
Así que, o mejoramos o nos seguimos quejoneando de lo mismo, bien listos para la queja, eso sí.

* Descanse en paz el fotógrafo/editor de imágenes para los Diablos Rojos del México, Abel Martínez, su Sra. madre y su Sra. esposa. Sus hijos se debaten entre la vida y la muerte. Todo gracias a un policía judicial ebrio que cruza un semáforo en rojo a toda velocidad el pasado domingo a las 20 horas.

1 comentario:

  1. Buenísimo mi Alex! Es impresionante la capacidad que tienes para describir una serie de situaciones frustrantes y encabronantes (perdón, yo tengo un vocabulario muy restringido) transmitiendo al mismo tiempo un mensaje positivo. Sigue con tu acertada crónica de lo que pasa en esta Ciudad de México. Un abrazo!

    ResponderEliminar